MESOAMÉRICA: Tierra encendida

Exhibición y coloquio con motivo del bicentenario centroamericano. 45 artistas exhiben videos, fotografías, instalaciones, libros interactivos, esculturas cerámicas y artesanales. Museo de Jade y la Cultura Precolombina del Instituto Nacional de Seguros, San José, Costa Rica. Del 4 de junio al 4 de agosto, 2021, de lunes a domingo.

Importa reconocer que esta región, en su complejidad, es una red cultural y geográfica muy porosa, conformada por puntos candentes que urge mapear e inventariar, para comprender la magnitud de esas llamaradas, y uno de estos puntos es el arte contemporáneo. La encerrona mundial que significó el 2020 debido a la pandemia, aceleró un espacio de investigación sobre sí mismos, lo que somos y hacemos en estos territorios iluminados por la flama creativa de sus habitantes desde tiempos inmemoriales.

Un proyecto de reflexión sobre colectivos mesoamericanos, conllevó en principio el propósito de aunar a creadores visuales que trabajan con la materia origen, barro, tierra, agua, aire y fuego, que manejan además las herramientas conceptuales para generar diversos tópicos: historia, política, economía, educación, salud, migraciones, pero también problemáticas como el trasiego de estupefacientes, dineros ilícitos, trata de personas o esclavitud, sin dejar de asir el núcleo de la tierra, extractivismo de los recursos materiales e inmateriales productos agrícolas y la cultura del agro.

Para el montaje del proyecto en la Sala Umbral del Museo de Jade y la Cultura Precolombina del Instituto Nacional de Seguros, San José, Costa Rica -junio y julio de 2021-, se contó con el talento y sensibilidad crítica de un equipo de curaduría integrado por Illimani de los Andes de Nicaragua, (máster en Curaduría por la Universidad de Navarra, España, y curadora de la Novena Mayinca: Orocidio), además de la experiencia y conocimientos de Erandi Avalos, (quien recién fungió como curadora para el Estado de Michoacán de la Bienal FEMSA de México). 

Vista de la sala de exposición "Mesoamérica: tierra encedida",
Museo del Jade y de la Cultura Precolombina, INS

Pronto logramos adobar la masa para las tortillas, en tanto el maíz figura como uno de los alimentos propios en la región. Avistamos e incluimos a Cuba, pues el Caribe tiene como pared geográfica oriental el istmo, relaciones culturales y migraciones crecientes en esa travesía que conforma nuestra Centroamérica. Además de la relación artística, cultural y política con la región Centroamericana. Nicaragua y Cuba como dos naciones que creyeron en una Revolución ahora convertida en dictadura.

La historia devela que en el pasado -siglos IX y X-, el litoral de la costa pacífica centroamericana fue ruta para los desplazamientos humanos provenientes del centro de México, que llegaron a poblar Nicaragua y Norte de Costa Rica, en particular Guanacaste, de ahí que sus artesanos guardaran como legado la cerámica chorotega, rica en hibridez cultural y natural, de ahí la presencia de esta manifestación en la propuesta. 

La región posee una historia independentista común, y estamos a las puertas del Bicentenario de una supuesta independencia, incierta, que implica tensiones hegemónicas, filibusteras y de dominación en los bordes del comercio global.

Entonces, observamos un istmo en tensión, no solo por la furia de volcanes, terremotos, huracanes, inundaciones, sequías, sino por el desencuentro entre pueblos y políticos que maniobran para mantenerse a como dé lugar en el poder, son una de esas contingencias perennes y oportunismos contra la voluntad de mayorías subyugadas y ninguneadas que nos invaden constantemente.

"El Agua y la vida", s/f, Fotografia digital. JESÚS CORNEJO (Mexico)

TIERRA ENCENDIDA

La muestra -tal y como se dijo, producto de una importante investigación curatorial-, prefigura un corpus de artistas quienes hilan la amplia diversidad de discursos contenidos en cuatro núcleos curatoriales: Tierra, naturaleza y biodiversidad como origen, medio y destino.

Esta organización de la muestra lleva a reflexiones sobre la relación entre lo humano y la naturaleza, desde lo básico y utilitario hasta lo simbólico y cosmogónico. Y, desde una visión holística, al tratar los elementos naturales aplaudimos al planeta por lo importante que es. Participan en este eje las artistas Diana Barquero, Verónica Alfaro quienes focalizaron las afectaciones del terreno por efectos del agua, deslaves, inundaciones y humedales. 

En un plano quizás metafísico, Carlos Aguilar de Cuba, aprecia otro carácter de contingencia: la inmersión de la arcilla cruda en el agua, observa un simil de lo que ocurre con nuestras culturas de faja terrestre rodeada de mares. 

Mariela Richmond acentúa la bioagricultura, una profunda revisión de la relación entre el campo y sus derivados. Diana Manrique aprecia la siembra de semillas iluminadas por la flama de las esperanzas de personas portadoras de una vela y una plegaria. Stephanie Williams y Alessandro Valerio, aprecian la materia geológica, la roca, componentes del planeta y los procesos de biodegradación. 

En el caso del guatemalteco Edgar Calel, sensible a la comunidad originaria colecta los productos de la siembra y los dispone en un altar a sus antepasados. Maribel Sánchez Grijalba valora lo chorotega a través de la mujer vasija, la que portaba el agricultor a la milpa para llevar el agua, y a su vez evocar la gracia de su mujer. Ramón Merino rememora el juego de pelota maya, que se hacía con fuego. 

El hondureño Josué Orellana evoca el ceremonial de la siembra del maíz, Yum kaak, en espacios simbólicos de la ciudad de origen, Tegucigalpa. Para Raúl Quintanilla la materia, como una piedra, es estética pero también engulle el aguijón que provoca la eterna discordia. Illimani de los Andes, Lila Espinoza, Xochitl Guevara, Morena Espinoza, se plantean un trabajo colectivo de amasar la arcilla con manos y pies, para cubrir la memoria colonial y descolonizar la materia. Guillermina Ortega trabaja sobre la acción del fuego para transformar el barro en cerámica y los procesos culturales que intervienen en esta tradición veracruzana. 

Jesús Cornejo, devela la poesía capaz de contener la imagen fotográfica de una mujer al recoger el agua, pero además el significado de celebrar el día de muertos en Oaxaca. Se exponen fotos de productos y hornos de Cerámica de San Juan de Oriente, municipio histórico, y estandarte de resistencia indígena de Masaya, Nicaragua. Tamara Ávalos trae a la sala otro signo de lo femenino, la mujer y la materia origen. 

Viviana Ramos de Cuba, prefigura un bosque de madera que entre sus ramajes sostienen casitas para pajaritos, instalación sonora que, en contradicción, deja escuchar, no el canto de las aves sino los murmullos urbanos.

"Génesis: Calendario lunar de Cihuacoat", 2021. Video Instalación. Lila Gómez, Xochitl Guevara, Morena Guadalupe Espinoza e Illimani de los Andes (Nicaragua).

HISTORIA, POLÍTICA Y MIGRACIÓN

A este eje se adhieren autores y obras que repasan estéticamente momentos destacados de la historia en diversos países mesoamericanos. Participa LFQ con una documentación titulada “Demolición y tensiones”

Las nicaragüenses Claudia Gordillo, con un ensayo fotográfica recuerda una Nicaragua revolucionaria que hoy se desvive en nuevas tensiones sociales y dictadura, e Illimani de los Andes comparte un video performance que evoca los muertes del 18 de abril 2018, revive la llaga y el clamor de exigir libertad en esa patria, y en condiciones similares a “AMA y no olvida, Museo de la Memoria contra la Impunidad el Museo de la Memoria Madres de Abril”, con un libro interactivo que utiliza la realidad aumentada representa la ausencia de quienes partieron de manera tan desconsoladora en esa realidad centroamericana humeante. 

Nora Pérez de Guatemala, Juanma García de Cuba, referencian el valor de los íconos con asperezas sociales y/o políticas que demarcan el territorio observado, como también lo hace Santiago Cal de Belice, al dibujar la cartografía mexicana asida a un machete, o adosar la típica guayabera tejida con sus sublimes memorias.

"Jackson", 2020. Acrílico/tela. JUANMAN GARCÍA (Cuba/USA)

IDENTIDAD Y METIZAJE A TRAVÉS DEL CUERPO Y EL LENGUAJE 

El eje propone piezas en las que el cuerpo físico y simbólico, así como el lenguaje oral, son la vía de manifestación de la identidad. Participa Ricardo Ávila con una pintura que focaliza la acción simbólica del migrante: caminar y levantar las manos para manifestar su existencia. Nelson Morales de México, fotografía las Muxe, con trajes típicos de elegante y provocativo buqué. 

Pablo Aguinaco Llano capta personajes vestidos a usanza originaria y orgullosos de su nacionalidad. Rodrigo Vidal Padilla expone Chipahuak, un fotoperformance en el cual inscribe el retrato en un plano colmado de la semilla sagrada. Yutsil Cruz también de México aborda el mito de Quetzalcóalt, desde la singular representación de Diego Rivera quien lo pinta rubio. 

La guatemalteca Sandra Monterroso va también a la raíz de la cultura Maya tematizando el Popol Vuh en su performance El Penacho de Vocub caquix. Rodrigo Zárate Moedano y José Santiago Francisco cargan la propuesta de extrañamiento por una lengua originaria como el totonaco: “Existe cuando hablas”. 

Luis Ricaurte explora un universo de imágenes de la cultura urbana en tensión, manifestadas en la interesante técnica del láser grabado. Antonio Zaragoza-Ericka Bulle atisban hacia los escenarios de la droga, con un fogoso trazo territorial demarcando sobre la misma el cuerpo. 

Rolando Castellón además del video performance en el cual declama la poesía de Omar D’ León, es autor del mapa de tierra de Mesoamérica, en la visión de Aztlán, la patria chicana que según Ibarra-Frausto dista desde California hasta Panamá.

"Palabra de reina". (Mixtequilla, Oaxaca). 2014. Fotografía digital. NELSON MORALES (México)

ICONOGRAFÍAS DE VIOLENCIA, RESISTENCIA Y MUERTE 

Explora manifestaciones a través de técnicas y estéticas diversas de asuntos relacionados con ritos y elementos funerarios, reflexiones filosóficas, políticas o físicas sobre la muerte, la violencia y la resistencia. Participan César Manzanares de Honduras con un video performance donde se advierte el tiempo que engulle la muerte y la vida que aflora a través de la niña que regala frutas a quien saca pompas de jabón de una calavera-vasija. 

Geraldine Guillén y Sofía Hamilton con un grabado argumentan la noción vida-muerte y deja abierta la esperanza en el recordar. Juan José Estrada Serafín, mexicano, sortea el icono de la violencia empuñada por la mujer armada y en particular la de una aguerrida anciana. 

El costarricense Alexander Chaves Villalobos, simboliza los territorios del trasiego y consumo de droga, que se vuelve como el agua, al equivaler el precio del oro. Omar Torres, de México aborda las grandes estructuras de una masa que aplasta la figura tridimensional de cristal, a punto de ceder. 

La cubana Yaily Martínez devela la metáfora del oro que, al caer sobre el escenario minimalista que simboliza la región, esas “pepitas” son sentidas al costo de una lágrima. 

El salvadoreño Juan Deras apunta hacia otro tópico del dolor, el de un pueblo que extraña a sus muertos y estos son extraídos de una fosa común para el descanso eterno en un sepulcro familiar. Jesús Cornejo recuerda el día de los muertos en Oaxaca como persistencia en la memoria popular y en el imaginario del significado de la muerte en aquella sociedad. Gabriel Rico, también mexicano, aborda esa misma efeméride desde los juegos de artificio, que prefiguran algarabía y luz, para conmemorar a quienes ya no están.

"Chayayotopia (en correspondencia con la pieza Patatutopia de Agnes Varda)", 2021. 
Instalacion escultorica. MARIELA RICHMOND

El evento inaugurado con el recital virtual “Voces Poéticas Mesoamericanas”, incluyó a los poetas: Norma Zamarrón, Pedro Chavajay, Sashenka Hernandez, Noé Lima, Valeria Cobos, Shirley Campbell Barr, Minor Arias Uva, reseñado  por el nicaragüense Yasser Salamanca (https://wsimag.com/es/cultura/65690-mesoamerica-tierra). 

La muestra es acompañada por un nutrido programa de conferencias magistrales y conversatorios online, donde se aprecia la agudeza de esos puntos candentes en el panorama internacional y realidad cultural mesoamericana.

En este proyecto expositivo organizado por el colectivo de arte contemporáneo Museo del Pobre & Trabajador de Costa Rica (ver catálogo en  https://issuu.com/luquiva/docs/mesoamerica_catalogo_2021destaca además el interés de acercarse a asuntos de conservación del planeta, como los agrícolas, el agua, el clima, el fuego, la tierra, la cerámica, los tejidos, pero también preocupaciones sociales, culturales, históricas, asuntos de género, minorías, inclusión o exclusión, preferencias sexuales que son factores siempre encendidos como también lo son la descolonización, las condicionantes neohegemónicas y neofilibusteras persistentes a más de quinientos años de atizar el fuego.

Luis Fernando Quirós Valverde, Investigador, curador y diseñador

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